PSdeG y BNG llegaron a un principio de acuerdo para el gobierno de la Diputación de Lugo que intentarán dejar definitivamente cerrado este viernes. La segunda de las reuniones entre los representantes de los dos partidos estuvo centrada en analizar los distintos entes, organismos y fundaciones dependientes de la institución provincial. Al terminar el encuentro, que duró más de tres horas, el actual portavoz del BNG en la Diputación, Antón Bao, dijo que las dos fuerzas políticas están de acuerdo en que es preciso "reformular" estos organismos, como el Centro Cinexético o la Sociedade Urbanística Provincial. También se abordaron otras cuestiones, asuntos que la Diputación de Lugo viene arrastrando desde hace años y que los socios de gobierno quieren resolver de inmediato, como el pago del canon energético, que la Diputación adeuda desde hace décadas a varios concellos de la provincia. Además, hablaron de la puesta en marcha de los parques comarcales de bomberos, paralizados por la falta de implicación de la Diputación hasta ahora, o la elaboración de una nueva regulación del funcionamiento del organismo provincial con el objetivo de convertirla en una institución "democrática e transparente". Bao calificó de positiva esta reunión y explicó que se avanzó "nun principio de acordo" para gobernar la Diputación de Lugo bajo los criterios de "transparencia" y de "apertura democrática". La próxima reunión entre los negociadores será el viernes por la tarde, un día antes de que se celebre el pleno de constitución del organismo provincial, el sábado por la mañana. En la reunión del viernes, socialistas y nacionalistas tratarán de cerrar el acuerdo que les permita gobernar juntos en la institución provincial, que estuvo 24 años presidida por Francisco Cacharro, del PPdeG. El representante nacionalista explicó que en estos anteriores mandatos la Diputación fue creando "un bó número" de "organismos satélites" para los que en muchos casos no se ve una funcionalidad o un objetivo claro. Como ejemplo, Bao puso el del Centro Cinexético o la Sociedade Urbanística que "haberá que mudar para que non interfiran nas competencias da Xunta en cuestions como a creación de polígonos industriais na provincia, moitas veces repartidos sen moito xeito". El BNG apuesta por reformular estos organismos para "darlles unha utilidade". Bao indicó que la oposición tendrá representación en todos estos entes, algo que no ocurría hasta ahora, para lo que el nuevo Gobierno tendrá que modificar en los próximos meses los estatutos de entidades como el Inludes, o la propia Sociedade Urbanística. Por su parte, el portavoz socialista Luís Ángel Lago declaró que "se avanzó mucho y el acuerdo está bien trabajado" e informó de que, tras la cita de este miércoles, las dos formaciones se tomarán una reflexión de 24 horas para retomar la negociación el próximo viernes por la tarde. "Esperamos que para este viernes se pueda alcanzar un acuerdo global en todos los temas", precisó Lago, quien se mostró convencida de que la alternancia permitirá "sustituir la práctica clientelar de esta institución y otorgar participación a la oposición".