El PPdeG critica lo que considera "escaso" grado de cumplimiento del bipartito en materia económica, y asegura que al llegar al ecuador de la legislatura están sin realizar muchos de los compromisos adquiridos en el acuerdo de Gobierno que suscribieron socialistas y nacionalistas hace 24 meses. Así, el portavoz de Economía del grupo de la oposición, Xosé Antón Orza, se refiere a iniciativas "totalmente abandonadas" como la puesta en marcha de una Oficina Presupuestaria en el Parlamento, que PSdeG y BNG reclamaban cuando eran oposición. Para Orza la falta de cumplimiento de este compromiso resta credibilidad a las promesas de transparencia para el seguimiento de la acción del Gobierno y de la ejecución presupuestaria. Además, recrimina que la Xunta continúa sin estrategia de desarrollo económico y social y la política económica continúa basada en la heredada del anterior Gobierno, contenida en el PEDEGA, sin que ni siquiera se hayan realizado los ajustes precisos para el período 2007-2013. Orza critica especialmente que sigan esperando turno iniciativas tan importantes como la supresión del impuesto de sucesiones y donaciones entre padres e hijos, lo que "condena" a los gallegos a una mayor presión fiscal de la que soportan muchos españoles y pone en riesgo la continuidad de importantes grupos empresariales en la comunidad. Sin modelo económico A juicio de Orza, el Gobierno bipartito "segue sen modelo económico coñecido" y advierte de que esta carencia "máis pronto que tarde pasarán factura en termos de crecemento e benestar". Destaca que no se han conseguido avances en el nuevo modelo de financiación autonómica y con respecto al Fondo de Compensación Interterritorial. Con respecto a la Lei de Subvencións y el Plan de Reequilibrio Territorial, puestos en marcha por el actual Gobierno, el diputado del PPdeG rechaza que sean presentados como "proxectos estrela" cuando se trata o bien de una iniciativa innecesaria, como en el primer caso, o de una medida que se adopta con retraso y sin objetivos medibles, en el segundo. La conclusión del portavoz de la oposición es que no son tiempos de triunfalismo porque crecer dos décimas más que España en 2006 deja a Galicia aún muy lejos del objetivo de alcanzar la media estatal a corto plazo. Considera que no es lógico instalarse en la complacencia porque los motores de crecimiento, como la industria y la construcción, están ralentizando su aportación al Producto Interior Bruto, PIB, y será difícil mantener diferenciales con respecto a España.