Los trabajadores de la recogida de basura de Mos continúan en huelga sin servicios mínimos

La alcaldesa pide en Radio Líder a los grupos que ?arrimen el hombro?

La basura continúa acumulándose en el concello de Mos por quinto día consecutivo, después de que la última reunión entre el Ayuntamiento y los trabajadores de la empresa concesionaria Geseco concluyese sin acuerdo. Los empleados continuarán en huelga, y sin servicios mínimos. El viernes se celebrará un Pleno municipal en el que cada grupo podrá exponer su postura ante este conflicto laboral. Los trabajadores exigen a Geseco, la empresa concesionaria, que se les pague la subida salarial pactada en su día. Para ello el Ayuntamiento debe hacer efectivo el acuerdo plenario del mes de febrero por el que se aprobaba una subida de 60.000 euros a la concesionaria, pero que fue cuestionado por un informe posterior del interventor. En Radio Líder, la alcaldesa de Mos, la socialista María Jesús Escudero, aclaró que no está sólo en su mano solucionar el conflicto, por eso pide a los demás miembros de la corporación que arrimen el hombro. Dice María Jesús Escudero que, tanto el PP como el BNG, no están dispuestos a cumplir el acuerdo plenario al que habían llegado en el transcurso de un pleno, al final de la pasada legislatura. Y los socialistas están en minoría. Un consenso que alcanzaban para incrementar el servicio de recogida de basura también a los polígonos industriales, al tiempo que satisfacían las demandas de estos trabajadores. Luego la empresa presentó un estudio justificando la cantidad necesaria para el pago, pero Intervención, según la regidora, no dio el visto bueno al considerar que el contrato para llegar a las mejoras no puede fundamentarse en una reclamación exclusivamente laboral. Por otra parte, Escudero denuncia que Geseco no está cumpliendo los servicios mínimos. Si continúan así las cosas, acudirá a la justicia ya que, las toneladas de desperdicios que se apilan en las calles de Mos, empiezan a convertirse en un problema de salud pública. La alcaldesa pide además a los vecinos que, mientras no se solucione el conflicto, colaboren reciclando. Desde los sindicatos, UGT defiende la decisión de no cumplir los servicios mínimos, y aseguran que este conflicto laboral ha alcanzado ya la dimensión política. La secretaria de organización de la Federación de Servicios de UGT en la comarca de Vigo, Rosa Acuña, cree que a estas alturas de la huelga discutir cuáles han de ser los servicios mínimos no tiene sentido. Se queja además de que nadie les haya convocado para discutir este aspecto. Para los trabajadores ya es hora de que los políticos dejen de poner excusas y busquen soluciones. Especialmente dura se muestra Rosa Acuña con el concejal del BNG, Xosé Manuel Ojea, a quien responsabiliza de no permitir que el acuerdo, al que habían llegado los grupos en un pleno, sirva para poner fin a una situación laboral que califican de precaria. En opinión de la sindicalista, si el edil no cumple su palabra es porque no acepta estar en un segundo plano político. Una actitud con la que, dice, perjudica a los trabajadores.