La Guardia Costera de Noruega apresó otros dos arrastreros gallegos en aguas del archipiélago de las Islas Svalbard. Se trata del Arosa Nueve y el Arosa Doce, ambos propiedad de Transpesca, la empresa a la que también pertenece otro barco apresado por el país nórdico hace menos de diez días, el Arosa Quince. Al parecer las autoridades noruegas acusan a los dos barcos, una pareja de bacaladeros, de registrar en el libro de capturas bastante menos pescado del que habían capturado. Los dos arrastreros se dirigen hacia el puerto de Tromso, a donde está previsto que lleguen este sábado por la tarde. Allí les espera un técnico del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) que viajó a Noruega la semana pasada para supervisar el caso del Arosa Quince. Este buque fue acusado por Noruega de no respetar las tallas mínimas, así como de manipular en el diario de capturas y de permanecer en la misma zona de pesca pese a constatar que sólo había ejemplares de dimensiones ilegales. Desde el MAPA se indicó a AGN que España está haciendo "intensas gestiones diplomáticas" a través del Ministerio de Asuntos Exteriores así como mediante al Embajada en Noruega. Además, fuentes del Gobierno insisten en que este apresamiento es "ilegal", ya que, según el Tratado de París de 1920, Noruega sólo tiene competencia para denunciar, nunca para sancionar. En esta misma dirección se pronunció la Consellería de Pesca al afirmar que los países "teñen que respetar os acordos internacionais". De todos modos, desde el departamento autonómico se mostró una total oposición a las prácticas pesqueras ilegales. Transpesca Estos buques, junto al Arosa Quince y al Arosa Catorce completan la flota de Transpesca, una sociedad constituida en 1971, que se convirtió en empresa pesquera en 1993. Desde entonces, según se indica en su página web, tiene como "objetos sociales" la pesca, la preparación y venta de bacalao, otras especies ícticas y sus derivados, junto al armamento y administración de buques de pesca. Además, la compañía pertenece al Grupo Meridional, constituido por más de 25 empresas, y a la Asociación de Empresas de Pesca de Bacalao y Especies Afines (Arbac). Estas detenciones en las Islas Svalbard se suman a las de otros dos barcos gallegos el pasado mes de noviembre en el mismo archipiélago por parte de Noruega, el Garoya Segundo y el Monte Meixoeiro. El primero es un arrastrero y el otro un congelador y los dos fueron acusados de pescar ilegalmente fletán azul, al superar el 7 por ciento permitido por captura accidental.