La iniciativa para que los ex presidentes de la Xunta pasen al Consello Consultivo sólo se aprobará por consenso

Ostentarían el cargo por doce años no renovables

El conselleiro de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza, José Luis Méndez Romeu explicó la propuesta del anteproyecto de ley por la que se modifica la Lei del Consello Consultivo y la Lei 1/1983 da Xunta e do seu Presidente que permitirá regular la situación de los ex presidentes del Gobierno gallego. Romeu aseguró que con la modificación de la normativa vigente, los ex presidentes podrán convertirse, si lo desean, en "membros natos" del Consello Consultivo, órgano que posee funciones de asesoramiento a la Administración y que está formado por 5 miembros electos designados por el presidente de la Xunta. Así, los ex presidentes ostentarán su mandato por un período de 12 años no renovable, excepto en el caso de ser nombrados miembros electivos del Consello. Según el conselleiro, los miembros del Consello Consultivo perciben en 2007 una retribución de 67.000 euros. En lo que respecta a la modificación de la Lei da Xunta e do seu Presidente, el conselleiro explicó que deja en manos del Gobierno -mediante un decreto- las compensaciones y los medios que se adscriban a los ex presidentes que no se incorporen al Consello Consultivo. La incorporación como miembro nato del Consello Consultivo de quien haya ocupado la Presidencia de la Xunta se producirá, según indica el anteproyecto de ley, dentro del periodo de un año desde la fecha de publicación de su cese como tal y precisa que, aquellos que tengan la condición de ex presidente de la Xunta en la fecha de entrada en vigor de esta ley, podrán "exercer o dereito de incorporación" al Consello Consultivo en estos mismos plazos y condiciones. Según Méndez Romeu, estos cambios tratan de "dar cumprimento" a un compromiso expresado por el titular de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, durante su discurso de investidura, buscando así "unha solución digna" que signifique "unha contrapartida" para la propia comunidad autónoma aprovechando la "experiencia" y "a bagaxe cultural" de los anteriores mandatarios. Para el conselleiro se intenta buscar "unha situación asimilable á das principais comunidades autónomas e do Estado" y que, al final, "é a expresión da valoración que a unha sociedade lle merece o traballo dos seus principais dirixentes". "Obviamente só irá adiante se ten o pleno consenso da Cámara", concluyó. Situación actual Méndez Romeu recordó que actualmente la situación de los ex presidentes está regulada por un decreto de 1990 que establece que, en los dos años inmediatamente posteriores a su cese tendrán derecho al 70 por ciento de la cantidad asignada al titular de la Xunta, lo que significa 50.037 euros para el año 2007. Asimismo, disponen de una persona a su servicio -funcionario de la Administración autonómica de nivel 18 o persona contratada por esta Administración-, de un automóvil de representación -del parque móvil de la comunidad- y de un conductor de la Administración autonómica, además de las "honras protocolarias" -situarse en el lugar inmediatamente posterior al presidente en los actos organizados por la comunidad autónoma dentro de su territorio- que tienen carácter vitalicio. Estado y otras comunidades Actualmente, la ley establece que aquellos que hayan desempeñado el cargo de presidente del Gobierno adquirirán la condición de Consejeros natos de Estado con carácter vitalicio y, en cualquier momento podrán manifestar al Presidente del Consejo de Estado su voluntad de incorporarse a él. En otras comunidades como Valencia, los ex presidentes son miembros permanentes del Consejo Jurídico Consultivo en la autonomía. En Castilla la Mancha, los ex titulares del Gobierno autonómico son miembros natos del Consejo consultivo durante la mitad de tiempo que hayan desempeñado el cargo y en Castilla y León, consejeros natos hasta los 70 años -derecho prorrogable hasta los 75-. Por otra parte, en comunidades como Cataluña, los ex presidentes no forman parte del Consejo Consultivo pero reciben unas prestaciones de considerable relevancia. De hecho, en el caso catalán perciben una asignación mensual por un periodo equivalente a la mitad del tiempo que han permanecido en el cargo y como mínimo por una legislatura, de una cuantía del 80 por ciento de la retribución como presidente y, además, disponen de un automóvil con chófer y servicios de seguridad.