Comienzan las labores de enfriamiento del "Ostedijk" a 13 millas de la ría de Viveiro

La tripulación ha sido evacuada y el capitán ha recibido atención médica

Ameijeiras defiende en Radio Líder las decisiones tomadas desde que saltó la alarma

El buque holandés "Ostedijk", que emana gases por la descomposición de su carga de fertilizantes, se encuentra a 13 millas al este de la ría de Vieiro, donde han comenzado las labores de enfriamiento de la carga. Según explicó la directora de Salvamento Marítimo, Pilar Tejo, el buque "Alonso de Chaves" es el encargado de rociar agua sobre la cubierta antes de abrir las escotillas. Esta maniobra se realizará cuando la tripulación pueda regresar y el barco se situé en aguas protegidas, a 6 millas de la costa. El gabinete de crisis ha dado al armador hasta las diez de la noche para que presente un plan de actuación que deberá recibir el visto bueno de Salvamento Marítimo. Toda la tripulación ha sido evacuada al remolcador "Don Inda" para facilitar las labores de enfriamiento, mientras que el capitán ha tenido que ser trasladado al hospital de Burela con los mismos síntomas de vómitos y escozor en los ojos que los tripulantes evacuados el domingo. Tejo reiteró que "no existe ningún riesgo de explosión, ni de incendio, ni de contaminación" y que tampoco se trata de un producto tóxico, sino "sólo irritante". En una entrevista en Radio Líder, el delegado del Gobierno defendió las decisiones se han tomado desde que el sábado saltaba la alarma. Después del susto inicial, todo apuntaba a que el barco podía seguir su camino, ya que la situación se había normalizado. Pero la descomposición del fertilizante continuó, y hubo que evacuar a cuatro tripulantes, por irritación en las vías respiratorias. Por eso, se cambió el rumbo del barco. Se descartó, entonces, la opción de llevarlo a puerto, para evitar cualquier riesgo. A pesar de que Manuel Ameijeiras ha insistido, en Matinal Líder, en que la emanación de gases no es tóxica. Sólo causa problemas a quien está sometido a un contacto directo y permanente, como los cuatro tripulantes que fueron desalojados al hospital coruñés Juan Canalejo, y a quienes se daba el alta poco después. El delegado del Gobierno defendió además que Galicia está mejor preparada que hace unos años para enfrentarnos a barcos peligrosos. Hemos avanzado, dice, en la preparación del dispositivo, en medios humanos y técnicos, y en coordinación. Touriño defiende el alejamiento También el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, ha defendido la opción de mantener alejado de la costa el ?Ostedijk?. El objetivo, según explicó Touriño, es que los gases que emana no afecten a la población, por eso la posición del buque dependerá de los vientos. El titular de la Xunta negó que el comportamiento haya sido ?errático?, porque se han tomado medidas en función de ?criterios de seguridad?. El buque ha sido trasladado al norte de Estaca de Bares en busca de una zona tranquila que permita además la ventilación del buque, para evitar que afecte a la población. Touriño insiste en que "no existe ningún riesgo de contaminación" y el gabinete de crisis baraja ?acelerar la descomposición de la carga" en el propio barco o retirarla bajo "absolutas garantías de seguridad". El buque estaría capacitado para permanecer en el estado actual "entre 15 y 20 días", un período en el que podría concluir la descomposición de la carga.