De acuerdo a un estudio médico británico aplicado en más de 300 mil personas, demostró que tener hábitos saludables reduce los riesgos de padecer demencia, aun si se tiene antecedentes familiares. Esta es una de las razones por las que se está promoviendo una vida sana. ¿Cómo puedes cambiar y mejorar tu estilo de vida en poco tiempo? Nosotros te enseñamos lo que tienes que hacer.
La vida saludable reduce los riesgos de demencia
En España, una de las enfermedades más frecuentes y, por ende, una de las principales causas de muestre en el país es la cardiovascular. Por eso, se han aplicado muchas medidas preventivas para combatir esta patología. Sin embargo, en este proceso, nos olvidamos de enfermedades que repercuten gravemente en nuestro estilo de vida, estás son las que se relacionan con la demencia, tal es el caso del alzhéimer.
Hasta hace poco, se había visto un gran incremento en los casos de padecimiento de este tipo de enfermedades que nacen a raíz del envejecimiento. Sin embargo, en determinada edad se puede estancar, incluso reducir los riesgos de padecerla. Esto se ha logrado gracias a que más personas están adaptándose a hábitos saludables.
En el nuevo encuentro de la Asociación Americana del corazón se presentaron nuevas evidencias. A más de 300 mil británicos se les hizo un seguimiento de sus hábitos saludables, teniendo en cuenta los factores de riesgo de tener demencia. Pacientes de entre 255 y 65 años con más de seis hábitos saludables vieron una mejoría en su calidad de vida y, sobre todo, en el funcionamiento de su cerebro.
Por supuesto, tener un antecedente familiar aumenta el riesgo de padecer demencia en más del 70%. No obstante, si la persona tiene más de tres hábitos saludables, este riesgo puede reducirse hasta en un 30%, aunque sus antecedentes familiares sean directos.
Buenos hábitos para combatir la demencia
Para llevar una vida saludable, se deben tener por lo menos tres buenos hábitos. Claro, para lograrlo es muy importante cambiar la mentalidad sobre lo que es una vida saludable. No se trata de no comer o ir al gimnasio 5 horas todos los días; debe haber un equilibrio, y aquí te lo enseñamos.
La alimentación
Uno de los riesgos más grandes de padecer cualquier tipo de enfermedad es el padecimiento de obesidad. Se recomienda que una persona con factor de riesgo de demencia tenga una masa corporal inferior a 30. A muchos esto puede resultarles complicado, sobre todo si ha llevado una alimentación desastrosa, pero no es imposible.
Para comenzar a llevar una buena alimentación, te recomendamos comprar productos Herbalife que te darán energía y reducirán tu apetito. De hecho, son una buena opción para disminuir los ataques de ansiedad, comunes entre comidas.
Estos suplementos nutricionales se deben añadir a una dieta saludable indicada por un médico especialista. Combinar bien las Herbalife ofertas con alimentos deliciosos y ricos en vitaminas y minerales te ayudará a bajar de peso rápido y de forma segura.
Actividad física moderada
Uno de los errores más comunes que cometemos cuando queremos bajar de peso y llevar una vida saludable es querer ir al gimnasio todos los días, a todas horas. Para comenzar, se recomienda que el ejercicio físico no dure más de 150 minutos a la semana.
A medida que vas adaptándote al régimen, puedes ir incrementando el tiempo y la intensidad de los ejercicios. Sin embargo, lo mejor es que esta evolución la realices de acuerdo a las recomendaciones de un profesional.
Otros hábitos saludables
Para tener una mejor calidad de vida, debes dormir por lo menos seis horas al día. El descanso te ayudará a tener energía y poder soportar la actividad diaria, incluida el ejercicio físico. Recuerda que ambos te ayudarán a que tu cerebro se mantenga activo y tenga descanso cuando sea necesario.
Hidratarse correctamente mantendrá tu cuerpo saludable. Además, debes combinar esta con una alimentación basada en frutas, verduras y proteína. Reduce el consumo de carnes procesadas y harinas refinadas que no te aportan fibra ni los suplementos nutricionales que necesita tu cerebro.
Aunque el alzhéimer no tiene cura, si hay terapias que pueden refrenar los efectos de la enfermedad. Mantener una vida saludable es eficaz para prevenir el desarrollo de la enfermedad o bien retrasar la aparición de la patología, por lo menos unos 5 años.