POLÍTICA
Feijóo aspira a trasladar a toda España su modelo tras dimitir en Galicia
Está previsto que la toma de posesión de Alfonso Rueda a la Presidencia del Gobierno autonómico sea el 14 de mayo.
SANTIAGO DE COMPOSTELA | El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha presentado este
viernes su renuncia oficial al cargo para centrarse en su papel como
líder del PP, convencido de que podrá trasladar al conjunto de España el
modelo que fue posible en Galicia durante trece años, centrado en la
unidad y la moderación y ajeno a la fragmentación y a los populismos.
En una declaración institucional, tras presidir una reunión
extraordinaria del Consello de la Xunta, la última antes de estar en
funciones, que será efectiva desde este sábado con su publicación en el
Diario Oficial de Galicia y en el Boletín Oficial del Estado, Núñez
Feijóo ha justificado su marcha por la situación política de
"frivolidad" y "populismo" que ve ve instalada en el panorama nacional.
"No quiero ni puedo compartir la premisa de que es imposible en España lo que sí fue posible en Galicia", ha destacado. La jornada comenzó a primera hora de la mañana en el Parlamento gallego,
donde el todavía presidente gallego se reunió con su grupo parlamentario
y su grupo de colaboradores más cercanos, antes de entregar la carta de
renuncia al titular de la Cámara autonómica, Miguel Santalices, y de
comunicar su decisión al jefe del Estado y al presidente del Gobierno.
De este modo comienzan a correr los plazos par su relevo, que tendrán su
primer hito el próximo lunes, con la ronda de consultas del presidente
del Parlamento a los grupos previa reunión, también la próxima semana,
de la Junta de Portavoces para convocar el pleno de investidura de
sucesión que llevará al vicepresidente primero, Alfonso Rueda, a la
Presidencia del Gobierno autonómico.
Está previsto que la sesión de investidura se celebre la semana del 9 de mayo y que la toma de posesión sea el 14 de mayo.
Durante la declaración institucional, Núñez Feijóo ha destacado la
unidad, la moderación y la estabilidad como elementos fundamentales de
su mandato en Galicia y como receta de futuro para su labor como líder
del PP en España.
"En este palacio, ante esta catedral, en la plaza donde confluyen los
caminos, mi caminata como presidente de Galicia acaba aquí. Santiago y
Galicia siempre serán un meta y para mí es un nuevo comienzo", ha
asegurado Núñez Feijóo, que se ha emocionado en varios pasajes de su
intervención, como con el recuerdo a Valeriano Martínez, conselleiro de
Hacienda fallecido el pasado mes de octubre en su despacho, así como las
menciones veladas al fallecimiento de su padre y al nacimiento de su
hijo.
En este tiempo, ha dicho, ha vivido en lo personal "lo mejor y lo
peor", y también políticamente; "con la confianza mayoritaria de los
gallegos cada vez que se la pedí" -en alusión a las cuatro mayorías
absolutas- y por las tragedias de los fallecidos en el accidente del
Alvia, los naufragios y los incendios forestales.
Ha asegurado que su balance es razonablemente bueno tras estos trece
años de gobierno, una etapa en la que su gobierno se tuvo que enfrentar
nada más llegar a la profunda crisis económica, posteriormente a la
pandemia y en las últimas semanas a las consecuencias de la guerra de
Ucrania.
Para Núñez Feijóo, en todos los momentos difíciles vividos la
estabilidad del Gobierno gallego hizo posible «que el avance no se
detuviese nunca», un avance vinculado también al éxito de la democracia
representativa y al autogobierno, ya que se puede servir al Estado desde
una comunidad autónoma y viceversa, ha destacado. En cualquier caso ha advertido de que tanto la democracia como el
autogobierno hay que cultivarlos cada día con cuidado para "evitar el
retorno a épocas funestas y para evitar rupturas traumáticas con la
legalidad".
En su intervención ha dicho sentir una mezcla de satisfacción y de
tristeza y ha saludado los logros del pueblo gallego durante su etapa,
ya que es a los gallegos a quienes les corresponde el mérito de lo que
se haya podido hacer bien, ha señalado.
La oposición
Desde la oposición, la renuncia de Feijóo, que han reclamado
numerosas veces en las últimas semanas, es vista como una oportunidad
para "un cambio de ciclo" en Galicia.
Así, la líder de la oposición Ana Pontón, ha considerado que "empieza
la cuenta atrás para que Galicia tenga un gobierno liderado por el
BNG" porque la comunidad "tiene ganas de cambio y de dejar atrás el
desastre" que cree que han supuesto los 13 años de Feijóo.
El "PP es el
pasado y el BNG es el futuro", ha proclamado.
Mientras, desde el PSdeG han criticado que el PP liderado por Feijóo
actúa "igual" que una fuerza de ultraderecha como Vox, al votar en
contra del decreto del Gobierno con medidas para atajar las
consecuencias de la guerra en Ucrania. EFE