El catedrático de Derecho Administrativo y uno de los padres del actual Estatuto de Autonomía de Galicia José Luis Meilán Gil defendió en Punto Radio que Galicia se ?tome su tiempo? para aprobar el nuevo texto ya que ?cronológicamente? ya no estamos en el tercio de cabeza. Cree que puede ser muy bueno aprovechar las experiencias existentes y sabe que el Estatuto catalán será una ?referencia inevitable?. Aunque aboga por atender siempre primero ?a nosotros mismos?, no rechaza importar a Galicia la disposición contemplada en el modelo catalán que compromete al Estado a realizar una inversión en infraestructuras en función del PIB. Un ejemplo al que considera que la Comunidad gallega podría agarrarse para que se invirtiese teniendo en cuenta nuestra ?deuda histórica?. Hay otros aspectos del Estatut que Meilán Gil no comparte, como la excesiva ?rigidez? de las competencias o el sistema de financiación basado en un ?reparto de dividendos? similar al de una sociedad mercantil, donde recibe más el que tenga más acciones. Mirando a casa, el ex rector coruñés recomienda no modificar la definición de Galicia que aparece en el actual Estatuto. Cree que es muy acertada porque ya contempla el respeto a la identidad gallega. Es partidario, en cambio, de incluir en el nuevo texto competencias que fueron traspasadas a través de leyes de delegación, órganos de nueva creación y ?afinar? en el tema de financiación para garantizar la ?igualdad de oportunidades? que cree que hoy en día no existe. El catedrático reconoce además que el papel que está jugando el nacionalismo gallego en los trabajos de reforma es ?coherente?. Recuerda que ellos no habían firmado el actual Estatuto, por lo que considera normal que quieran un nuevo texto y apuesten por cambios más profundos. Respecto a una posible reforma de la Constitución, en cuya redacción también participó, Meilán Gil aclara que no es contrario a reformas, pero siempre que no se produzcan de forma indirecta. Cree, por ejemplo, que sería peligroso que se eliminasen las disposiciones transitorias, como se recomendaba en un dictamen del Consejo de Estado, ya que se perdería el artículo por el que Galicia se igualaba en estatus de ?comunidad histórica? a Cataluña y País Vasco.